TODOS A UNA

En estos días de Cuaresma las actividades de nuestras Cofradías y Hermandades se multiplican, cuando no hay pregones de la propia hermandad, hay triduos, quinarios o novenas, también presentaciones de carteles, certámenes musicales a cargo de las bandas de cornetas y tambores... y todo esto reflejado a veces en la prensa local, con algún artículo de opinión destacando la presentación del soneto de las 7 palabras, la petición del indulto de algún reo, o la problemática actual con el espacio para guardar las andas y/o carrozas de las 7 Palabras, amenazando ésta con no sacar algunos pasos en la procesión del Viernes Santo.

Al final todo esto se traduce en que cada uno y cada cofradía, o eso es lo que se interpreta y parece, va a lo suyo. Y mal camino es ese.O vamos todos juntos por el bien de nuestra Semana Santa, o esto corre el riesgo de ser 19 "reinos de taifas", o 20, mirando cada cofradía por sus propios inetereses.

Desde hace tiempo se viene hablando sobre la problemática de nuestra Semana Grande, de como tenemos que cuidarla y fomentarla, de como preservar nuestras raíces, nuestras señas de identidad... Y estando cada uno a lo nuestro lo único que conseguiremos es que esto al final se termine perdidendo.

Ya hubo un tiempo, finales del S.XIX y primeros años del S.XX, en que nuestra tradición más importante estaba a punto de desaparecer. Aquello por fortuna se reorientó y se reorganizó, quizás no como a todos nos hubiera gustado, claro esto analizado después de pasasdos casi 100 años, pero si no es por esos ilustrados, ¿que estaríamos haciendo cada cofrade actual cada Semana Santa?. Reflexionemos un poco en ello.

Seguramente no vuelvan otros "Gandásegui", ni otros "Agapito" o "Cossío", que se molesten tanto en resurgir algo en estado avanzado de declive y ocaso.

"O vamos todos a una o esto se nos muere".

Está claro que cada hermandad debe buscar y cuidar su identidad, su forma de ser como cofradía, su historia, su patrimonio, ... pero todos esos matices deben sumar, no restar, aunar, no dividir, para que al final el resultado sea el beneficio y la mejora de nuestra Semana Mayor, de nuestra tradición más importante y más arraigada. Fíjense en la foto de un Domingo de Ramos de hace 60 años, ¿es como ahora?, puede que si en algunos aspectos, en otros seguramente no.

Si queremos que esto sea posible, lo dicho "Todos a una", o dejaremos que todo esto que a muchos Vallisoletanos nos apasiona, y que gracias a Dios pervive después 5 siglos de historia, se nos vaya de las manos.